Cubiertos en la mesa,
Un plato enseñando una comida en ruinas.
Descansan los dedos consolándose entre el mantel y la servilleta sobre las piernas
Mostrar las manos sería peligroso.
La tentación de animarse a tomar otro sorbo de distancia.
Tus ojos han zarpado hacia una luna que se esconde.
Me doy cuenta que al decir que te quiero, en realidad, te quiero.
Tambien me doy cuenta que no puedo pronunciar tu nombre.
2 comentarios:
lindo código de amor esconden esas letras.
decir te quiero y sentirlo es suave y sabroso como un crepé! (o un crep?)
un beso, Leonardo.
Así es, hay cosas que uno va descubriendo mientras las va diciendo, así cuando uno escribe, también.
Claro que la aludida seguirá sin complicarse la vida.
Un beso Miralunas.
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