domingo, 19 de julio de 2009

Constelación

A Layla.


El amor es como el rocío.
Tratar de olvidar es más bien como un diluvio.
Es estar a tu lado lo que me obliga a alejarme,
debo estar con otros.
Aunque sean espanta cuervos de los mitos míos.

Una calle que se dibuja como un río iluminado
por donde creo caminar,
en silencio.

Una luna sedienta de luz.

Finalmente soy presa de mis recuerdos
no es lo que uno vive, lo que vive.
Sino lo que recuerda.

Pues existe sólo el pasado.
El presente es, a mi entender, una irregularidad del tiempo,
que se aleja al pasado en el instante que lo presenciamos.

Ha tenido que arrodillarse esta noche para dibujar tu piel,
la tonalidad gris de tus colores.
No sé cómo haces para mirarme siempre de lejos cuando estás cerca.

He tenido que recorrer todo este trecho
para encontrarme, nuevamente, solo.
Para darme cuenta que me va a faltar tiempo para quererte a mi manera.
Me va a faltar fuerzas para abrazarte como quisiera.

Sequía de estrellas.

10 comentarios:

pecas dijo...

El presente es, a mi entender, una irregularidad del tiempo

Si Layla no está, deje las añoranzas a un lado, guarde lo lindo...
y viva

Un besote Verde, q bello y triste escribiste hoy... me traspasaste.

:*

Fermín Gámez dijo...

Sugerentes contradicciones de las que hablas en tu poema. Cercanía versus lejanía, presente versus pasado.

Y además, muy bien escrito.

Zayi Hernández dijo...

eso no se hace...dedicar un poema a alguien para evocar una ausencia es como que te den un chupete y no te dejen abrirlo...el amor es amor, no es querer a mi manera...el querer no conoce maneras...cuando se ama, se está así de contrariado pero hay que dejarse llevar, ya después tenemos el chocolate para quitarnos el despecho ;)
Besitos.

Daphne dijo...

está bien.. a tu pedido, pasé por acá. ay cómo ruega! jajajaja
no mentira!

oie está lidno esto que has escrito chochera!

quién es layla ah???

verdemundo dijo...

Pequis, Layla en realidad nunca estuvo. Creo que me gusta dibujarla a mi manera. Me complace mucho que haya tocado algunas fibras. Es el mejor regalo. Gracias Pequis.

Fermín, siempre es un honor verlo por estos lados del mundo. Le agradezco mucho sus comentarios. Y lo animo, nuevamente, a publicar un libro online para sus lectores de este hemisferio.

Zaya, por dejarme llevar es que llego a estos manotazos de ahogado. Será quizás lo último que le escriba. Claro que siempre rompo promesas...

Daphne, jaja.. te picaste con mi comentario.. todo lo que tengo que hacer para que vengas a visitarme. A mí también me gustaría saber quién es Layla.

Daphne dijo...

jajajjajaja yooooo!!! nooooooo

jajajjajaja

me siento ligeramente estafada... cómo no vas a saber quién es Layla!

Luly dijo...

El amor es el nacimiento de un sentimiento,
y la muerte de otro,
los recuerdos nos invaden
y a veces nos agobian,
tratar de olvidar es díficil,
pero no me parece una cosa imposible.
Alejarse de las personas,
no ayuda a alejarse del dolor que causaron.
Solo nos hace recordar con más intensidad.

Besos y abrazos.

chica diez dijo...

...estas nostalgico verdemundo!
te quedo lindo.

verdemundo dijo...

Daphne, Layla también se siente estafada conmigo... :(

Luly, que profunda.. yo más bien soy medio explicativo de la superficialidad.

Iziar, a veces también tengo mi corazoncito.

Karla Galaviz dijo...

sigo teniendo 19 hasta que me llegue septiembre...
:)

salUdOs
mUUUua!