sábado, 24 de julio de 2010
Pido silencio
Ahora me dejen tranquilo.
Ahora se acostumbren sin mí.
Yo voy a cerrar los ojos.
Y sólo quiero cinco cosas,
cinco raíces preferidas.
Una es el amor sin fin.
Lo segundo es ver el otoño.
No puedo ser sin que las hojas
vuelen y vuelvan a la tierra.
Lo tercero es el grave invierno,
la lluvia que amé, la caricia
del fuego en el frío silvestre.
En cuarto lugar el verano
redondo como una sandía.
La quinta cosa son tus ojos,
Matilde mía, bienamada,
no quiero dormir sin tus ojos,
no quiero ser sin que me mires:
yo cambio la primavera
por que tú me sigas mirando.
(Pablo Neruda)
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
3 comentarios:
A mi me hubiera gustado ser Matilde para que me dijeran esas palabras tan bonitas, pero creo que nunca encontrare a mi Pablo Neruda (y yo se que él tuvo muchos amores en su vida, pero igual Matilde fue alguien especial para él).
Saludotes
Es mejor que no lo encuentres, Neruda te hubiera sacado más cuernos.... claro pero con palabras bonitas.
tienes mucha razón verdemundo. El amor es mas que palabras (aunque me encantan)...deben ir acompañadas de consecuencias amorosas...lo que le faltaba a Neruda
Publicar un comentario